Casa Mejuto, 70 años de ilusión

La historia que te vamos a contar comenzó en el 1954. Francisco y María decidían entonces asentarse en Melide para dar forma a un sueño. Eso que hoy denominamos emprendimiento fue en aquel momento un deseo de prosperar que llevó a este matrimonio a fundar Casa Mejuto. Comenzaba a andar un ultramarinos de la época, que acercaba todo lo necesario para el día a día de sus clientes. Clientes con los que, por cierto, con el tiempo se irían creando lazos tan estrechos que parecían y parecen familia. Y es que la buena atención es un reto aprendido de los abuelos que seguimos persiguiendo a diario. Más tarde, se irían sumando nuevos servicios como fueron una casa de comidas, una pensión o un almacén de vinos que completaban así la actividad de la empresa familiar. Ya con la segunda generación, sin descuidar el aprendido y manteniendo la esencia de Casa Mejuto, se dio un paso adelante y la distribución de bebidas fue ganando terreno. Así hasta hace aproximadamente 30 años, cuando la tercera generación se inició en la elaboración de los productos que hoy dan nombre a Casa Mejuto: licores, vermús, vino espumoso y, más recientemente, nuestra ginebra London Gin. Formación, adaptación a los tiempos y el maridaje constante entre innovación y tradición marcan nuestra historia actual. Porque en estos 70 años cambiaron muchas cosas pero hay algo que se mantiene: la ilusión del 1954.